Capítulo 3

Mi reina:
Tu ausencia en estos momentos es angustiante. Estoy convencida de que tus esfuerzos no son en vano, pero debo informarte de que nuestra situación empeora por momentos. Tu guía y tu apoyo se echan de menos, ahora más que nunca.

Hemos realizado avances considerables e irrevocables en nuestro entendimiento de la Oscuridad. Sus deseos y sus necesidades están cada vez más claros. Tengo mucho que contarte, pero me preocupa que desapruebes la forma en la que hemos obtenido esta información.

Antes de que otros vengan y te digan que se ha corrompido a Eris Morn, déjame decirte que estoy luchando contra la Oscuridad con la propia Oscuridad.

Es de vital importancia para mí que no te quepa ninguna duda de que estoy en plenas facultades mentales y físicas, y que nuestro acuerdo no ha cambiado. Aunque esté usando la Oscuridad para combatirla, mi objetivo sigue siendo el mismo. Sé que hay amenazas peores acechando en todos los frentes. Debemos contraatacar proporcionalmente, y así es como yo lo estoy haciendo. Este es mi frente. Si no hacemos nada, Savathûn se convertirá en la peor amenaza de todas.
La última vez que la vi, me humilló. Intentó poner a mis amigos en mi contra y robarme mis fuerzas. Ella no se imagina lo poderosa que soy ahora. Me encargaré personalmente de que muera.

Reconozco que hay ira en mi interior. Sé muy bien que la Oscuridad preferiría explotar mi rabia antes que otorgarme la calma. No insultaré nuestra amistad con mentiras: es difícil controlar mis emociones. Siento la tentación de ceder. Te ruego que no me condenes. Tú sabes lo que he visto. Lo que he sufrido. No soy de las que se entregan al desenfreno imprudentemente. Aunque esto pueda parecer un último recurso, he descubierto un gran potencial para todos nosotros.

La Vanguardia se muestra reticente, pero cada vez más guardianes se unen a nosotros. Pronto, empuñaremos el poder que necesitamos para acabar con los odiosos esbirros de la Oscuridad de una vez por todas. Pronto, la reina bruja sentirá toda la fuerza de mi ira. Pronto, tendremos paz.

Espero que, cuando vuelvas, encuentres un mundo libre de conflictos. Por ahora, te pido que sigas creyendo en mí. Tu apoyo ha sido como un faro en la noche más oscura. Si se apagara, me temo que me perdería para siempre.

Estoy segura de que estás horrorizada por estas noticias, pero créeme cuando te digo que es lo mejor que podría pasar. Aunque desapruebes mis métodos, has de saber que el fin justifica los medios.